Para este día la familia americana con la que vivíamos había decidido llevarnos a conocer el Monumento Nacional de Colorado. Nosotros vivíamos en Mesa, cerca a Grand Junction, y este monumento está ubicado en Fruita a aproximadamente 30 min de Grand Junction.
El Monumento Nacional de Colorado es enorme y lindo para disfrutar de la naturaleza y sus paisajes, destacándose sus formaciones de piedra arenisca coloridas y erosionadas, sus elevados monolitos y sus escarpados cañones. Vale resaltar que además se han encontrado en esta zona fósiles de dinosaurio y leños petrificados.
Las actividades para hacer acá son diversas, entre ellas: manejar bicicleta, hacer largas caminatas, escalar, ir de picnic con la familia o amigos, tomar hermosas fotos, acampar; asimismo hay diversas actividades para los más pequeños, sí, tal como lo leen, los más pequeños se pueden convertir en exploradores. Por otro lado, si están interesados hay charlas por parte de geólogos especialistas que les contaran todo sobre el lugar y su formación. Además podrán reunirse por las noches para observar el cielo y las estrellas; ¿se imaginan como se debe ver el cielo? ¡Yo no me lo perdería!
Ah una cosita, como es un área protegida todo esto debe hacerse con autorización y/o previa reserva, así que mejor les dejo el link oficial del lugar dónde encontrarán los horarios y el book para las reservas: http://www.nps.gov/colm/index.htm
Sobre los precios de entradas, les cuento que hay días que la entrada es libre, esto para motivar a los visitantes a disfrutar de la naturaleza americana. Luego existen diferentes tarifas que varían entre los $5 y $10, nada caro ¿verdad? Pues entonces ya saben si alguna vez pasan por ahí no duden en tomarse un tiempo y recorrer este lugar que está BUENÍSIMO!!!