Después de dejar la casa de Ville Valo, fuimos al centro de Helsinki a visitar la famosa Catedral de Helsinki, posiblemente el edificio más visitado de la ciudad. Está ubicada en una plaza, al lado de la universidad, su cúspide se puede ver desde varios puntos de la ciudad, destacando por encima de todo al estar ubicada al final de unas escaleras. Esto es un efecto curioso porque hace que la catedral sea todavía más impresionante. Presidiéndola está la estatua de Alejandro II de Rusia; imponente y serio como gran duque de Finlandia que fue.
Los tres, mi amigo chileno y su novia, subimos hasta la Catedral, desde dónde contemplamos Helsinki, el puerto, entre otros. Recorrimos la iglesia y tomamos más fotos. A nuestra salida, la novia de mi amigo me daría la siguiente sorpresa. ¿Cuál será? nos dirigíamos a un lugar llamado Aikuistenlelukauppa. ¿Adivinan de qué se trata?

Sí, es un Sex Shop y ¿qué haríamos en un Sex Shop? Bueno pues, resultaba que este era el negocio de la familia de Ville Valo. Entramos al local y fuimos recibidos por un señor muy amable, cómo era de esperarse, no hablaba inglés, por lo que mi amiga sería la principal traductora. Luego de cruzar unas cuantas palabras en finlandés, me diría: “¿adivina quién es él? …. es el papá de Ville Valo”. Quedé tan sorprendida, casi sin palabras, pues estaba frente al papá de mi ídolo, y no lo podía creer. Al reaccionar, le pedí a mi amiga que le diga lo mucho que admiro a su hijo y que soy de Perú y que me encanta Finlandia. El señor Valo muy agradecido contaba que era la primera peruana que pasaba por ahí. Lo habían visitado muchos fans argentinos, brasileños, un par de chilenos, pero nunca de Perú y estaba feliz de saber que su hijo tiene fans en lugares tan lejanos. Sin más lo abracé y le pedí una foto. El señor Valo, aceptó la foto y mi abrazo. Me regaló unos cuantos posters de HIM y una postal que decía “Bienvenida a Helsinki” además de agradecerme por el cariño a su hijo. Yo sólo atinaba a decir “Kiitos” repetitivamente, lo cual significa “gracias”, a lo que el señor Valo dijo: “no tiene que agradecer todo el tiempo, es un gusto para mí” y mi amiga contestó: “es la única palabra en finlandés que sabe jajaja” ( eso no es cierto, también sé decir Hola xD)


Y así terminarían mis días en Finlandia, con la mejor sorpresa que una fan podría recibir. Claro que hubiera estado mejor si hubiera podido conocer en persona a Ville, pero ya con esto estaba bastante agradecida, y más porque salió de un momento a otro, sin que yo lo planeara.
Pero esperen, porque ahí no acaba la historia de HIM y Ville Valo, en realidad después sí llegué a ir a uno de sus conciertos y verlo en persona, pero esa ya es ooootra historia, que más tardecito se las cuento ;).
Además le mandé a Ville un “chullo peruano” ante lo cual recibí un e-mail de agradecimiento de su parte. ¿Qué más les puedo decir? Ville Valo y su familia son grandes personas, tan amables y sencillas. Y Finlandia es un país que se merece conocer. Si alguna vez tienen la oportunidad no duden en pasar unos días por ahí, pero de preferencia en verano porque sino se morirán de frío jejeje…
Esta aventura es la continuación de: Una Visita Inesperada
Ya vuelvo con más historias. 🙂
Que gustooo,estoy pensando en viajar a Finalandia,dónde queda la torre de Ville,él ya no vive ahí?
Me encanta Finlandia y me encantaría conocerlo.
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La verdad que no tengo la dirección de la torre, me llevó mi amiga filandesa, pero Ville ya no vive ahí. Vendieron la torre.
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Que emoción,tan grande estar en helsinkin,y connocer al padre de ville y la que fue su casa ….felicidades
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Hola Thelma!! siiiii fue una experiencia increíble!!!! ¨*__*
Saludos!
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